La vida son los miseros segundos que deciden la cara o cruz de la moneda que está de canto encima de la mesa.

martes, 11 de junio de 2013

Ahora mismo hasta las manos me pesan, o directamente no me hacen caso. Quisiera escribir, tanto para plasmar lo que siento y desahogarme, como para leer lo que escribo y recapacitar y pensar en cómo veo las cosas. Pero ni siquiera eso puedo.
Supongo que mañana será otro día, tendré otro punto de vista y otra posición, o no. La verdad ahora mismo no sé ni cuándo levantarme, si madrugar, si deja que pasen las horas, no lo sé.
Pero quiero dejar constancia de que hoy siento que nada tiene ningún sentido. Puede que a los demás les afecte lo que escriba, pero más que a mi escribirlo, seguro que no. Hoy es un día que ha dejado huella. No sé ni qué pasará mañana, ni pasado. No tengo ni puta idea.
Tengo tantas dudas que hasta me da miedo ser yo mismo, pues hoy todas las filosofías que redactaba, pueden ser usadas y a la vez pueden joderme aún más.

Dulces sueños a los que podáis.


Los pelos se ponen de punta
mientras sientes la sequía en tu garganta.
Las letras hoy no quieren salir
hoy las putas letras se esconden de mi.
Nada me sonríe, me vuelvo a sentir así
mirar alrededor y ver que no hay nadie aquí.
Ya perdí la cuenta de los días que pasaron de esta forma
ya no sé qué hacer, ni sé cuál es la necesitada reforma.
Hay muros que no podemos traspasar
muros que no podemos ni saltar ni atravesar.
Cosas que no te crees, palabras que no esperabas
situaciones improvistas, y discusiones por la cara.
La putada, de notar como todo va en tu contra
darte cuenta que no eres la persona que querías, eres otra.
Te miras y ni te reconoces, quieres saber qué hay en el espejo
quiero saber dónde el rumbo que seguía se perdió.

O no tengo ganas de que las palabras salgan
o no quieren salir.

lunes, 10 de junio de 2013

Otra noche.

Si estuviese yo estaría mejor
estaba ella y se marchó con el sol.
Es otra noche asolas yo.

Never Back Down

  Qué difícil es encontrar soluciones cuando todo se oscurece. Cuando la rabia aparece, cuando las lágrimas caen.
  Buscamos respuestas tanto en el pasado como en el presente, buscamos errores en lo dicho y en lo hecho, y no paramos pues queremos solucionarlo todo cuanto antes, hasta que nos damos por vencidos, o directamente ni intentamos buscar.
  Quizás el problema esté en la forma de ser de cada persona, que por peculiaridad no encaja con la realidad de alrededor. Que estás tan harto de ti mismo como de la realidad que se muestra, harto de la forma curiosa que tiene la vida de interaccionar contigo, tratándote a la patada, poniéndote en los puntos de miras. Estás tan harto de luchar, de tragar y aguantar y seguir poniéndote de pie para hacer frente, y luego ves que tú mueres si tuvieran que defenderte. Mucho más, que en estas palabras quisiera expresar.
  Quizás el problema sea que vives en el pasado, que no encuentras tu presente y que tienes miedo al futuro que se te viene encima. Que buscas mil y una respuestas para ordenar el puzzle de tu pasado con los puntos de vista que desconoces y las intenciones que jamás sabrás, o es que buscas en el pasado respuestas para tu futuro, para encarrilar tu presente dirección al futuro que te mereces.
  Quizás el problema sea que tragas, tragas y tragas, ni vacías ni explotas, que hasta la almohada está harta de soportar tus potas en forma de palabras desgarrantes.
  Quizás el problema es que vives en tanta tensión que estás en tensión continua, como un resorte a punto de saltar a todo aquel que se acerque, que estás enfado con el tiempo, con el destino, contigo mismo pues ni te soportas.
  Quizás el problema sea que tienes miedo a darte cuenta que no eres aquello que deseabas ser un día, cuando eras niño y buscabas tu destino. Tienes miedo de ver que la estela de lo que querías está lejos de lo que eres.
  Pero la única realidad es que lamentando el problema no se soluciona. Diciendo que no tiene solución, menos aún, ni teniendo miedo, ni escondiéndote, ni eludiendo todo, ni dejarlo pasar, y menos aún dar tiempo al tiempo a ver si este cura todas las heridas.
  La solución, no está clara pues depende de cada persona, pero la mejor forma de solucionarlo es no lamentarse, no dar un paso atrás. No ceder.


never back down

Finos hilos.

Lo que siento, no hay palabras ni lenguaje para definirlo, no hay palabras para explicarlo cuando escribo hablo y redacto. Ni verso ni prosa, ni tochaco o 140 caracteres. No sé si me di de cruces. No sé si me crucé con un gato negro, rompí espejos o se me cayó la sal. La verdad no tengo ni idea. Pero la cosa es que al parecer el karma se ha enzarzado conmigo, son únicamente cuatro soluciones: Obtuve mucho, y ahora me cobra, hice mal y ahora se venga. Haré mal y se venga por adelantado, obtendré demasiado y me cobra la renta.
Es duro, levantarse cada día con la misma puta rutina. Con las mismas pocas ganas de hacer nada, pero aún así tengo que separar contextos. Tengo que concienciarme de que estamos en época trascendental y tengo que dar la talla. Pero los acontecimientos, el destino, parecen estar en mi contra. Ya van casi tres y nada cambia. Solamente me ponen dificultades, quizás para aislarme, pero la cosa es que no paro de darle vueltas.
No sé cómo terminará cada día, ni la semana ni el mes, pero me siento como si estuviera un fino hilo que además de levantarme la piel, me sostiene ante la caída.


Así es como aprendes, a base de hostias
cuando estamos solos y no hay nadie si no te acercas.

jueves, 6 de junio de 2013

Hoy es el típico día que hasta la almohada me repudia a mi y a mis pensamientos, pues hasta ella se cansó de escuchar mis pensamientos y mis sentimientos.

Cosas que nadie enseña

No sé quién lo va a leer, no sé siquiera si esto será leído, pero si no suelto un poco de presión, reventaré.
Hoy ha sido un día bastante memorable, pese a que no es el único ni el primero así de interesante, hoy ha sido la guinda del pastel. Frustración, soledad, incomprensión y oscuridad. Sentimientos que hace mil que no sentía, han vuelto a mi.
Miraba a mi alrededor y no había nadie, no había ni un sólo alma. Ningún apoyo.
Ha sido un día en el que hasta la música era insuficiente, e incluso me hundía más.
He buscado distracciones, he buscado remontar el vuelo. Pero lo único que provoqué fue una anchura y una profundidad mayor en el pozo.
El mundo se rompía en pedazos mientras se congelaba, y no había ningún calor a mi alrededor para evitar este sin vivir.
Sé perfectamente el efecto que tendrán estas palabras si son leídas. Sé perfectamente también que no serán tan leídas como quisiera. Y eso que ni siquiera he escrito todo lo que está intentando ser eliminado.

A fin de cuentas nadie me enseñó a vivir, y de igual forma que no salen algunos ejercicios, hay días que se tuercen, incluso en cada una de las 24 horas.

50%

Me voy dando cuenta que la gente a menudo intenta cambiar a las personas, intenta quitar y eliminar las características que detestan de las personas, sin embargo esperan que los aceptemos tal y como son.
Es cierto que cada persona es como es, y la esencia del mismo sin cambios, es lo que nos define y nos hace únicos por eso nadie debería tocar lo que es íntegramente nuestro. De la misma manera, cambiar significa evolucionar, tanto para uno como para los demás, por lo que también hay que cambiar para llegar a ser mejor de lo que somos.
Y además al igual que aceptamos, deberían aceptar los cambios que ocurren en ti, al igual que deben aceptar los cambios que quieres realizar en ti mismo, porque tú no eres solamente lo que eres, también eres lo que intentaste ser, lo que quisiste y lo que quieres. Todo eso forma tu persona.
Tenemos que ser un poco de lo que somos y un poco de lo que quieren que seamos, y en ningún momento debemos tener miedo a los cambios de las personas. Porque a fin de cuenta en la propia esencia del ser humano, está el cambio evolutivo.

Somos nuestra esencia, lo que quieren que seamos, lo que queremos ser y lo que quisimos.