En lo nuevo hay viejo.

Hice la maleta con papel y boli, dejando el pasado en su sitio, atrás. Pasos nuevos, nuevos caminos, trayectos, nuevos cruces, nuevas personas, nueva vida, nuevas letras. Nuevos pensamientos, pero en la maleta siempre vienen los sentimientos, pese a que salgan algunos nuevos, los cimientos siempre serán los mismos. Estoy aquí, pero tú allí, es la única razón para mirar atrás, y volver sobre lo andado. No obstante, es hora de cambiar, es hora de adecuarse a la vida por la que luché.

Este guerrero, tomó vitaminas nuevas, cambió de yelmo en el corazón, un afilado y puntiagudo bolígrafo  y a base de parrafadas toca volver a las andadas, desplegando la magia única contenida en mi interior.