La vida son los miseros segundos que deciden la cara o cruz de la moneda que está de canto encima de la mesa.

sábado, 27 de octubre de 2012

La historia prefiere las leyendas a los hombres.
La nobleza a la brutalidad.
Los discrusos imponentes a las hazañas silenciosas
La historia recuerda la batalla pero olvida la sangre
Como quiera que me recuerde la historia, si es que me recuerda, solo será una fracción de la verdad.

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