Cambios

La forma de pensar y sobre todo, de vivir del ser humano, podría decirse que es cíclica, ya que por mucho que pase y por mucho que ocurra a lo largo de nuestra vida, tarde o temprano la mente empieza a jugar con nosotros recordando nuestro pasado, recordando lo que hemos vivido, lo que hemos sentido, y para qué variar, lo que hemos sufrido. Y así es como una montaña rusa, volvemos atrás, damos la vuelta de 360º recordando todo, y tienes dos posibilidades, caerte del triciclo, o seguir adelante. Y tras dar la vuelta, paraece que lo vemos todo cambiado, no al revés pero si cambiado, como si todo hubiese cambiado de sitio, de olor, incluso lo que te hace sentir. Hasta que te das cuenta, tarde o temprano y por caprichos del destino, que el único cambio que hay está dentro de ti, y en tu forma de ver la vida.

Cuando vuelves a casa, todo está igual. Huele igual. Y te hace sentir igual. Y llega un momento en el que te das cuenta, que el que ha cambiado has sido tú.