Nuevos pasos.

Poco a poco estoy aprendiendo a dejar salir a todos mis fantasmas interiores. Todo el mal, la rabia y el miedo que hay en mi. Toda la amargura que pasé, todos los malos momentos y los malos recuerdos que hay guardados, toda la oscuridad que hay en mi. Todo ello estoy intentando sacarlo de una vez de mi y de mi vida. Fue, pasó ocurrió y no puedo cambiarlo. Punto.

Es cierto que llevo muchos días hablando de lo mismo y dándole vueltas como es normal en mi. Pero bueno, supongo que porque me cuesta creerlo, ya que he alcanzado una vida que siempre quise. Y poco a poco va mejorando. Pocas son las cosas de las que puedo quejarme, ya que he conseguido casi todo por lo que he luchado, e incluso aquello que creí imposible. Y aquí o tengo. Delante de mi. Por lo que lo que ha pasado, ya no es algo malo, si no el puente que me ha traído a este lado del río. No sé si es bueno o no tener en cuenta ese pasado, pero por si acaso, prefiero olvidarlo, ya iba siendo hora.